Esta semana recibí la publicidad de un curso sobre administración del tiempo y reducción del estrés. Me pareció muy interesante como se presentaba la relación entre las técnicas de administración del tiempo y el manejo del estrés. Sin embargo, no es tan sencillo. Por esto en organizarte, hemos iniciado esta conversación desde la perspectiva de las competencias de autogestión, para llegar a una mejor organización de vida y por consiguiente sentirnos mejor y con más calma. Pero hay que trabajar en nosotros mismos para practicar y fortalecer nuestra autogestión.
En esta publicación vamos a conversar sobre la importancia de la asertividad, como una competencia para la autogestión. Ser asertivo significa que podemos expresar nuestros sentimientos y pensamientos, respetando los sentimientos y pensamientos de los demás, en armonía y en equilibrio, sin ser agresivos o pasivos, cuidando la relación con el interlocutor.
El estilo agresivo impone el punto de vista de uno mismo sobre el punto de vista y la relación con el interlocutor.
El estilo pasivo hace prevalecer siempre la postura de los demás sobre la de uno mismo. Entonces, y por el contrario, mantiene la relación con el otro, pero a costa de negar o disminuir el propio punto de vista.
Ser asertivos significa ser eficaces en la comunicación, lograr expresar lo que queremos decir, con seguridad y confianza en uno mismo, cuidando la relación con los demás y estableciendo relaciones positivas. En una palabra, me respeto y te respeto.
Una fórmula sencilla, que en lo personal me ha sido útil para trabajar la asertividad en mi forma de expresarme es la siguiente: Observo – Entiendo – Escucho – Comprendo – Me doy cuenta que tu (o para ti) … [ se describe de manera objetiva el pensamiento, sentimiento, conducta, necesidad de la otra persona] – Pero yo [ pienso, siento, necesito [ se da la postura personal] ; entonces te propongo, entonces que te parece si, [ damos alternativas] .
Reflexiona un momento en cómo es tu estilo de comunicación. Seguramente si en momentos te sientes tan abrumado como yo a veces, es muy probable que tu estilo sea pasivo, y tengas dificultad para decir «no» o reconocer y expresar tus propias necesidades, y acabes haciendo cosas que no te corresponden.
Date la oportunidad de practicar la asertividad, verás los beneficios que trae consigo para tu gestión personal.
Feliz día
Gaby Farías
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