Recientemente he leído diferentes publicaciones de autores en temas de organización y productividad, que señalan que no es posible o no es adecuado pensar en tener una vida en «balance»; sino más bien enfocar nuestra vida como una integración de diferentes responsabilidad. Durante el confinamiento por la pandemia, los límites entre «trabajo», «hogar», «persona», «relaciones», se difuminaron aun más.

El balance que proponemos en Gabee Vida Organizada, es trabajar por dedicar nuestra atención, tiempo y energía a cuatro dimensiones, igualmente importantes y valiosas, de una forma integral y consciente. Estas dimensiones son las siguientes: Persona, Realización, Relaciones y Espiritualidad.

La dimensión de «Persona» represantada por el símbolo de un árbol, se refiere a nuestro bienestar integral y nuestro desarrollo personal, implica aprender y desarrollar prácticas de autocuidado todos los días. Así como un árbol, con raíces, tronco y ramas que tienden al cielo, que da sombra y refugio, así nosotros debemos trabajar en nuestra persona primero, para dar a los demás lo mejor de nosotros mismos.

La dimensión «Relaciones» representada por un sol brillante, se refiere a desarrollar y cuidar los vínculos de amistad, de amor, de aprecio, de sentido, con nuestra familia, nuestros amigos, nuestros compañeros de trabajo y nuestro ámbito social más amplio. No es cuantos amigos en»redes sociales» tenemos, sino cuantos amigos de verdad tenemos y atendemos de forma personal y real. No se refiere a relaciones sociales superficiales sino a vínculos con causa y con sentido. No se refiere a cantidad o popularidad, sino a calidad y cercanía real.

La dimensión «Realización», reúne las actividades que realizamos en las cuales aplicamos nuestros talentos, nuestras capacidades, y son un medio para servir y para crecer. Nos ponemos en acción y aportamos ya sea en el hogar, en un trabajo, en un voluntariad; o en todos estos frentes al mismo tiempo. Aprendemos haciendo, en la práctica de actividades, contribuimos a un mundo mejor con nuestro granito de arena. Se representa con una colmena, haciendo referencia a las trabajadoras y activas abejas.

Finalmente, pero no menos importante, tenemos la dimensión «Espirtualidad»,representada por una estrella, que significa nuestros valores, nuestros principios, nuestra devoción, nuestra intención. Reconocer un Ser superior a nosotros, relacionarlos con El, y darle un sentido trascendental y de propósito a las dimensiones anteriores. Esta estrella nos ilumina y nos guía en todo lo que hacemos.

Más que una separación entre actividades, el balance de tu vida es reconocer estas dimensiones y de forma consciente invertir tu atención, tiempo y energía para incrementar su valor en tu vida.

¿Te animas a una vida organizada y con balance?

Gaby Farías